Los instrumentos musicales requieren un estricto control de humedad en el ambiente en que se encuentran. Es esencial para la preservación de todas las cámaras, cajas de resonancia y correderas de registro. El aire seco toma vitalidad y humedad de los materiales, y en consecuencia, afecta la calidad de sonido del instrumento y le resta valor monetario.
Los músicos valoran muchísimo la calidad de sus instrumentos, aun cuando los ejecuten como un pasatiempo y no profesionalmente. En particular, pianos, violines y cellos pueden ser de muy buena calidad, además de algunas guitarras e instrumentos de viento, que pueden ser muy valiosos.
Maderas para instrumentos musicales - Tonewoods
Los pianos y muchos instrumentos de cuerdas, de punteo y de viento, están hechos de maderas preciosas. Estas maderas conocidas como "tonewoods" son maderas que crecen lentamente y de forma recta, y poseen determinadas propiedades sonoras particularmente buenas. Las maderas tonewood se secan al aire y se estacionan durante muchos años, hasta que la madera libera todas las tensiones en la medida de lo posible. Se usan muchos tipos de maderas, dependiendo del uso requerido. Una propiedad que comparten todas ellas es que son higroscópicas. Se contraen cuando se secan. Cuando absorben agua, se expanden. Por lo tanto, los instrumentos más valiosos se producen en climas con temperatura y humedad controlada (según el fabricante, por lo general a 20–22 grados Celsius y aprox. 40 a 55% de humedad relativa). La humedad ambiente a la cual se expone luego el instrumento y cuánto tiempo se le da para adaptarse, influye en gran medida sobre la vida útil, aptitud para la ejecución sonido y por último, aunque no por ello menos importante, la estética. Los instrumentos musicales se ven muy afectados por el aire demasiado seco. Si un instrumento tiene una temperatura templada y se expone al aire frío, su superficie se seca, porque calienta el aire que lo rodea, el cual, al mismo tiempo, está absorbiendo su humedad.
Cuerpos de madera fina
Los instumentos étnicos suelen fabricarse con frutos leñosos, como por ejemplo calabazas. Los instrumentos de orquesta clásicos europeos, se construyen con maderas finas. Ya sea que se trate de violines, guitarras o contrabajos, la tapa finamente procesada de dichos instrumentos tiene con frecuencia menos de 3mm de espesor, con una superficie extensa. En algunos casos, se pegan juntas diferentes maderas, otras veces se incrustan. Los diferentes tipos de madera utilizados, experimentan diferentes grados de contracción. En la jerga especializada, se dice que "encoge". La madera de haya tiene un índice importante de encogimiento, mientras que la de caoba, tiene uno mínimo. Mientras más delgada es una madera, más significativas son sus reacciones ante los cambios climáticos. Esto se aplica especialmente a los instrumentos más valiosos, dado que éstos se fabrican con maderas aún más delgadas recubiertas con barnices más finos.
El ejemplo de la guitarra
Los bordes de trastes afilados, son un síntoma inicial claro de un ambiente excesivamente seco. Esto se debe a que el diapasón de madera se contrae cuando le falta humedad al aire, mientra que los bordes de metal de los trastes, no lo hacen. En consecuencia, los bordes metálicos de los trastes sobresalen en sus extremos. La madera reseca también puede advertirse por el cambio en la superficie de la guitarra. En un estado normal, la misma se abomba apenas ligeramente hacia afuera. Es convexa. En cambio, cuando se contrae, se hunde, haciéndose cóncava. Una superficie ondulada es otro signo de baja humedad ambiental. Esto sucede porque las partes de madera preciosa entre los anillos de crecimiento se contraen más que las partes duras de la madera. A veces en la superficie se producen grietas desde debajo del puente,hasta casi el final del cuerpo del instrumento. Esto se debe a que las cuerdas empujan el puente hacia abajo con fuerza. También la veta de la madera en el puente corre diagonalmente a la de la superficie. Por eso, no sólo las diferentes maderas se contraen de maneras diferentes sino que también lo hacen en distintas direcciones.
Si la humedad relativa ambiente es extremadamente baja, la tapa se vuelve a hundir. Los extremos del puente parecen curvarse y abrirse. Si se expone a presión, el puente puede quebrarse. Junto con la tapa, el extremo del diapasón se hunde ligeramente hacia la boca. Como resultado, la altura del encordado desciende y las cuerdas tocan la superficie, produciendo un efecto de zumbido. Las varetas que no se aflojan, pueden empujar hacia afuera las piezas del montaje de la tapa. Las fuerzas de corte pueden causar que las líneas de varetas interiores se aflojen. Esto ocasiona la interferencia de ruidos resonantes. Además, la estática en el cuerpo del instrumento se debilita y se generan otras tensiones.
El ejemplo del piano
Los pianos y otros instrumentos de teclado, tienen tablas armónicas hechas de pícea maciza para intensificar su sonido. Para lograr esto se unen muchas aletas de diferente espesor. Las cuerdas se ajustan a través de la tabla armónica. Su tensión es especialmente elevada en los pianos de concierto. La tabla armónica puede rajarse debido a la sequedad. En el caso de los pianos de cola, los martillos pueden trabarse debido a la influencia de la humedad ambiente. Cuando una tecla se traba, suele ser por esta razón. Los pianos suelen ser chapeados.La técnica de chapeado se usa para perfiles e incrustaciones de madera unidos muchas veces. En el proceso, se prensan diferentes piezas de madera juntas formando una superficie suave. Si el aire es demasiado seco, los espacios entre las capas de madera se abren y dejan al descubierto la capa de abajo.
Por todos estos motivos, tiene sentido tener en cuenta el nivel e humedad correcto. Después de todo, el aire seco que extrae vitalidad y humedad del material, daña la calidad de sonido y le restaa valor al instrumento.
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